VOYEUR...

VOYEUR…

(Enero 26, 2012)


No se mide el vouyerismo del impávido sujeto, que se adolece y hasta cela como un lobo los sensuales movimientos que en el ritual del amor exploran dos seres tiernos que consuman en sudores los ardores de su cuerpo…

Saborea la batalla de sus orgasmos sediento, entre gemidos que dicen que de amor están muriendo más de mil veces en una, pero a la vez existiendo mas de mil veces la vida que se siente floreciendo en el edén que aunque puro del libido va naciendo.

Fémina boca besando, manos de hombre descubriendo y estoico disfrutando el fantasma del silencio sin egoísmo notado por el poder que le dieron, les comparte de sí mismos su diezmo, tributo a Eros.

El montaraz forajido en las cumbres de su pecho sabe que a punto su boca está de besar el cielo y ella con furia de loba multiplica su sustento para que digno y piadoso muera de dicha en su reino con el néctar delicioso que le mana por tenerlo…

Penetrados los impulsos, manos, besos, savia, sexo; la pasión y el ufanismo que de amor pasa a ser fuego con unísonos orgasmos que al mismo cielo advirtieron, terminaron en perezas hechas cóncavo y convexo que originaron más ganas cuando completos se vieron y el fantasmal inquilino de excitaciones y tiempo, repitiendo la faena volvió a lucir su reflejo para que ellos lo miraran como el lujurioso espejo…

Juguimorpe