DE LA SOLEDAD Y EL EXILIO
(Enero 4, 2011)

La piel la siento cansada del exilio
y en mil monedas invertido el arriesgarse,
algunas veces arrastrarse como anfibio
por la materia que allí pueda ganarse.

Si bien, desnudo el corazón sin equilibrio
deja el tic-tac de sus impulsos balancearse…
se inclina entónces hacia la falta de alivio
porque ha podido y no ha querido emanciparse.

Y aquella sombras de dolor son algo mío
siempre viváces para asi consolidarse,
y en dulce ruego me da pena el desvarío
de cruel luchar y no verlas ocultarse

Lejos los sueños y los bellos amoríos
que en antaño nos brindaban su realce,
hoy son solo insensatos extravíos
cuya distancia acabó con su romance.

Y la altivéz caudalosa como ríos
donde tan solo la ambición puede bañarse
se va cambiando por un gran escalofrío
que del recuerdo del amor no ha de apiadarse.

Es como mueren al final los atavíos
que nos ligaban desde apenas despertarse
a la esperanza de sentir los mismos bríos
que al ser foráneos no pudieron cultivarse.

Jugui_morpe.